La Virgen se ha aparecido a un pastorcillo (2)

..."La mujer hermosa estaba resplandeciente, con una corona revestida de pan de oro, como recién hecha, en su cabeza. Un pañuelo blanco recogía su pelo, y enmarcaba su frente; sus ojos, castaños, un poco rasgados, no eran capaces de ocultar una pizca de preocupación, 
o quizás de molestia, en sus adentros."


Dejaba ayer aquí mi sueño. ¿Recuerdas?
Con preocupación y molestia en los ojos de La Mujer Hermosa.

Mis párpados también estaban cargados de lo mismo: preocupación por no alcanzar nuestro ansiado sueño; y molestia por los silencios, la falta de atención y hasta la falta de respeto humano en nuestro sueño.

Con un respeto inmenso hacia la Bella, avancé en mi ensoñación, mas de rodillas. Y me atreví a preguntar: ¿A qué es debido esa tristeza, que nos contagia a todos?

La mujer hermosa había bajado por la escalera de jalde, dorada como su corona de pan de oro reciente; y se aproximó a mí, como se acerca una imagen con un zoom de la cámara de fotos. Yo restregué mis ojos, para espantar mi incredulidad en los milagros, y la cara de la bellísima mujer me llegó a nublar la vista. Y un poco el corazón.

"Estoy en una triste cuarentena - musitó la Hermosa - Llevo en un cruel confinamiento irracional va para cuatro largos años, esperando, paciente y obediente. Y ahora, hasta me han impuesto una mascarilla de silencio".  



Yo, en mi sueño, llegué a pensar que todo era una invención de mi ansiedad, alimentada en un amor no correspondido. Y que eso mismo le pasaba a la aparición hermosa. Ella mi miró, y en mi consuelo, dijo:
"No te atormentes. Tu sueño es también mi sueño. Y no desesperes: despertaremos juntos. Han de dejar por fin que se levante aquí un templo a la Verdad, a la Belleza y al Amor. Y será pronto"

La bella mujer se dio la vuelta y regresó a la escala jalde, camino de su Cielo, gris todavía. Pero dejó detrás de sí un milagro sencillo. Volvió a encender una llama de fe, de esperanza y de amor en el corazón de un pastorcillo.

***

También tenemos noches de pesadillas en Escalada: templos vacíos; inquietos nubarrones que amenazan catástrofes de inaniciones; ojos que miran para otro lado; oídos sordos a las inquietudes: culturales, artísticas, turísticas, divulgativas, populares, devocionales... y también religiosas (en el más puro sentido)... 



Cuando pase esta mala noche cargada de pesadillas, hemos de ser capaces de llenar este mundo, ahora gris y vacío. El confín de la nada se llena con la bondad, con la serena paciencia, con el perdón (dado, y recibido), con la utopía posible, con la constancia, y con las obras buenas.   


  
 © Comisión de Donantes Pro-Virgen Santa María de Escalada
                              (relatos para una crisis)

*****

El "sueño del pastorcillo", 
es tan fácil de cumplirse,
 como esto: 

 

*** 

Comentarios

Entradas populares