jueves, 13 de noviembre de 2025

"ALMA DE CÁNTARO versus ALMA DE CÁNTARA"

 "ALMA DE CÁNTARO versus ALMA DE CÁNTARA"

Pongamos que hay un diálogo entre dos.
Dice el hombre:
- ¿Dónde vas tú, "alma de cántaro"? Tan sumamente ingenua, simple y pasmada, o falta de entendimiento...
Ella, femenina, sabe que es todo eso sólamente a medias. Porque se debeía decir que ella es "alma de cántara"; y por eso se mofa del uno masculino. Y le responde:
- Yo, que soy vasija, tengo mi parte hueca (mi alma, y mi entendimiento) la mitad más pequeña de la que tu presumes... que ¡para qué te sirve!
Al ego masculino le sale un "puchero" por la boca; y la cántara se sonríe con una mueca de revancha.
Él se acelera:
- No me vengas otra vez con tu habitual comparación "de tu mente y mi vacío"; que me tienes harto.
Ella ríe abiertamente. Y se apresura a rebatir:
- Tú, cántaro de barro, soportas malamenrte tus 8 azumbres de vino, que te obnubilan y dejan seca el alma. Sin embargo yo, cántara, me manejo muy bien con 4 azumbres, que me aportan lucidez... y una chispa de alegría.
El varón, resignado, busca en la alacena una "tagarra", y no la encuentra; y al final su mano temblorosa tropieza con un "jarro". Y se conforma con poco más de un libro de morfina, entre rosada y tinta, esperando poner paz entre los dos...
Los dos por fin deciden ponerse a admirar juntos la magnífica escena que Bartolomé Esteban Murillo nos dejó magistralmente allá por 1670 y 1675, en "Las bodas de Caná", donde pueden verse tinajas, cántaros, cántaras y algún jarro menudo.
Y hubo paz.

"Las bodas de Caná", de Bartolomé Esteban Murillo, pintado entre 1670 y 1675.  


No hay comentarios:

Publicar un comentario

Espero tu comentario amable. Me ayudará a mejorar. Gracias.

"ALMA DE CÁNTARO versus ALMA DE CÁNTARA"

  "ALMA DE CÁNTARO versus ALMA DE CÁNTARA" Pongamos que hay un diálogo entre dos. Dice el hombre: - ¿Dónde vas tú, "alma de ...